En un entorno que cada día se vuelve más dinámico para las empresas (privadas y públicas) podemos identificar claramente a un grupo que vive en el filo de la navaja, las áreas de Recursos Humanos, esos departamentos de soporte que han sido actores importantes en los procesos de transformación. Ya sea que se trate de situaciones de crecimiento, donde están siempre contra reloj o se encuentren en procesos de ajuste, donde tienen que apoyar la salida de personas a las que antes reclutaron y seleccionaron, el caso es que están en el ojo del huracán.

Sin embargo y para bien, las empresas son personas y eso es algo que no hay que dejar de lado. Hoy las empresas compiten desde antes de entrar en la carrera, compiten por el talento y en este campo Recursos Humanos puede ayudar mucho, sobre todo en lo interno, que siempre es más leal y conoce la cultura de la organización. Apoyar a la operación para identificar el talento y establecer un plan de carrera que le ayude a arraigar es fundamental. De nada sirve atraer si no podemos retener. Ya no se puede evaluar con base en rasgos generales, hoy se necesita definir claramente cuáles son las competencias que se requieren en el puesto y definir acciones para apoyar su desarrollo. No se hace competente al que no lo es, pero sí se le puede ayudar a que él la desarrolle y se haga cargo del proceso.

Atraer y retener el talento no se da por casualidad, se necesita una estrategia para que la organización sea atractiva y lleguen los que queremos, con el perfil necesario y eso requiere un plan. Conozco el caso de una cadena de autoservicios que estableció una alianza con una Universidad para que ésta desarrollara una carrera que le permitiera contar con ingenieros especialmente orientados a instalaciones de autoservicios con el incentivo de la seguridad de la contratación. Todo el camino, desde la admisión a la carrera fue apoyado por la cadena de autoservicio así como las materias y las prácticas. Eso es pensar integralmente y no estar poniendo parches en los conocimientos y perfil requerido.

Flexibilidad parece ser la nueva tendencia y eso también vale para Recursos Humanos. No todo lo tienen que hacer ellos, porque los proyectos plantean necesidades temporales, apoyarse por despachos externos permite una visión más objetiva y menos costosa. Cada mercado laboral es diferente, no es lo mismo el reclutamiento en la frontera con Estados Unidos que en el centro de la república, las oportunidades, la rotación, los sueldos, son diferentes.

Atraer el talento parece ser la prueba del ácido. Si no lo hay, todo se complica. En este sentido nada como anticiparse, porque cuando hay prisa las cosas se complican, conocer los planes de crecimiento permite trabajar en preparar y buscar candidatos.

Tener un entorno, un ambiente de trabajo atractivo es fundamental. Los mejores reclutadores son o deben de ser los que ya están dentro, ellos pueden hacer atractiva la empresa a los que buscan un buen lugar para su desarrollo, pero eso no puede montarse como obra de teatro, requiere de un soporte de realidad que permita que los prospectos vean la organización como un lugar donde vale la pena estar. Que todos conozcan los proyectos, los retos de la empresa es una buena señal.

Atraer el talento no termina cuando las personas se incorporan al trabajo, en realidad termina cuando deja la empresa. El cómo se vive el proceso tanto de entrada como de salida dice más que mil políticas y eso es parte importante del equipo de RH.

Finalmente hay que decir que como proveedor de servicios RH debe estar cerca de sus clientes, ajustando sus procesos para apoyarlos en este entorno tan intenso, tan cambiante, dispuestos a probar todo. Vender sus servicios es algo que hoy RH tiene que plantearse, si quiere dejar de debatirse entre ser héroe o villano.

Escrito por: Luis Alfredo Santana Zevada

Es Ingeniero Químico de la Universidad de Guadalajara; Master en Dirección de Empresas y egresado del Programa AD2 del IPADE. Es socio fundador de Amigos del Recién Nacido (ARENA); es miembro del Consejo Superior del Colegio Chapultepec y otros consejos de dirección de empresas en Culiacán.

También ha sido miembro del Consejo de Canacintra en Culiacán. Columnista de el diario NOROESTE en Culiacán, Mazatlán y Los Mochis y Columnista invitado en El Imparcial de Hermosillo, es actualmente Director General de ICAMI Sede Culiacán y Profesor de Factor Humano y Comercialización.