Escrito por: Eduardo Fernández
Ingeniero industrial por la Universidad Panamericana, sede Guadalajara. Master en Dirección de Empresas por IPADE. En su experiencia profesional se ha desempeñado como Director de Entrenamiento para Convergencia y Director Regional Occidente de Citibank México y Profesor del área de mercadotecnia y planeación estratégica en la escuela de ingeniería de UP y profesor áreas de comercialización y administración en ICAMI. Actualmente, es Director General de ICAMI Región Occidente.
“El éxito no es un accidente. Es trabajo duro, perseverancia, aprendizaje, estudio, sacrificio y, sobre todo, amor por lo que estás haciendo o aprendiendo a hacer”.
– Pelé
Durante varios años he participado en actividades de apoyo a emprendedores en distintas organizaciones y colaborado con su desarrollo. A lo largo de este tiempo, me encuentro con una reflexión: qué afortunados somos al contar con tantos emprendedores en México y específicamente en Jalisco, son una luz de esperanza para el desarrollo regional.
Los emprendedores realizan una función social muy importante al generar nuevos productos o servicios en la comunidad, simultáneamente producen fuentes de empleo, crean riqueza e impulsan el desarrollo económico. Por lo cual, en esta ocasión quisiera enfocarme en las características de los emprendedores con los que he colaborado, su aportación y la forma en la que podemos apoyarlos a consolidar sus emprendimientos.
Algunas de las características que he encontrado en los emprendedores durante este tiempo son:
- Apertura creativa e innovación: ofrecer un producto nuevo o con características claramente diferenciadas para un segmento de mercado específico, advierte conocimiento de las necesidades que no son atendidas por la oferta actual y requiere desarrollar las competencias y capacidades para producir ese producto o servicio que sí lo haga. En muchas ocasiones, los emprendedores forman parte o conocen a alguien cercano que se encuentra en ese segmento de mercado insatisfecho, en el que los productos que se encuentran disponibles no cubren sus necesidades totalmente y se plantean: “Yo puedo hacerlo mejor”.
- Visión y liderazgo: ahí donde otros simplemente ven lo que hay, los emprendedores son capaces de ver lo que no existe, lo que debería haber, lo que ellos quisieran que hubiera; y con esa visión son capaces de contagiar a otros para sumarlos en el esfuerzo de hacerlo realidad.
- Resiliencia y resistencia a la frustración: los emprendedores son capaces de resistir y enfrentar muchas negativas, ven los obstáculos como retos a vencer y no desisten ante las primeras dificultades. De hecho, disfrutan los retos y celebran el avance cada vez que se alcanza, alimentándose de ese éxito para enfrentar la siguiente barrera. Se apoyan de su “apertura creativa” para buscar nuevas formas de lograr lo que se proponen.
- Adaptabilidad y capacidad para desistir: al mismo tiempo de plantearse un objetivo y buscar con determinación cómo alcanzarlo, los emprendedores son capaces de ver las señales que indican que lo que están haciendo requiere un ajuste y lo hacen rápido y con frecuencia. Si la primera aproximación no fue suficiente, van por la siguiente y la siguiente…
- Capacidad para asumir riesgos calculados (y a veces no tanto): una característica común en los emprendedores es arriesgarse. Arriesgan su patrimonio y su tiempo. Arriesgan lo que han conseguido en la empresa, pero ese riesgo lo contrastan con su propia capacidad y responsabilidad para cumplir con los compromisos adquiridos.
- Conformación de grupos de trabajo: saben que para potencializar el producto se requiere la participación de muchas personas que realicen las distintas funciones de una empresa: comercializar, producir, administrar, etcétera. Otra de las características de los emprendedores es reconocer que requieren ayuda. Este es quizá un tema que necesita mayor atención, pues existe la creencia de que únicamente el emprendedor puede “hacerlo bien” y por lo mismo, se requiere destinar tiempo y disposición para cada miembro del equipo.
- Pasión, compromiso y determinación: quizá la característica más representativa de los emprendedores es la pasión por lo que hacen. Es ahí donde puedes incluso, predecir el éxito del emprendimiento. En ocasiones, el emprendedor tiene que recorrer diversos proyectos y realizar numerosos cambios de carrera hasta encontrar aquello que realmente le apasiona.
Para apoyar el emprendimiento se requiere fortalecer las capacidades de los emprendedores en cada uno de los puntos anteriores. De la misma forma, las competencias que se solicitan pueden definir el nivel de desarrollo del emprendimiento. Por eso que el acompañamiento en el progreso del emprendedor es clave para el éxito y la consolidación de los proyectos.
Hoy en día, ¿hay algo en lo que apoyes a la creación de empresas? ¿Qué más podríamos hacer para favorecer el emprendimiento?